“No es fácil para la mujer insertarse en el mundo del fútbol”

Lo aseguró Agustina Vidal, la primera relatora de fútbol femenino, en una charla abierta ofrecida en el Instituto Crónica

Si ganar espacios en la sociedad es de por sí complejo para la mujer, hacerlo en un ámbito dominado por los hombres, resulta poco menos que una utopía. Agustina Vidal, sin embargo, lo tomó como un desafío y poco a poco se fue ganando un lugar en el mundo del fútbol hasta convertirse en la primera relatora de fútbol femenino del país y en una de las voces más respetadas en esa disciplina.

“Nunca pensé que me iba a dedicar al periodismo deportivo”, se sinceró en la charla que les ofreció a los alumnos en el Instituto Superior Crónica, quien hoy se destaca en la pantalla de la TV Pública, DeporTV y ESPN. Claro que se capacitó para trabajar en los medios: es licenciada en Comunicación Social y locutora. “Estudiar periodismo te da herramientas, además, como comunicadores tenemos que estar siempre actualizados, meter un F5 cada tanto”, aconsejó.

Agustina se atrevió a tomar distancia de la vertiente más taquillera del periodismo futbolero actual. “No me gusta ese periodismo que se regodea en las polémicas -explicó- que da vueltas sobre si fue o no fue penal. Prefiero contar historias, y en el fútbol femenino hay muchas para desarrollar: desde las propias historias de vida de las protagonistas, hasta los problemas y reclamos de las jugadoras”. Y puesta a elegir entre el fútbol masculino y el femenino, aclaró con una sonrisa “el masculino es el que paga mis cuentas y en el femenino está mi pasión. Soy una de las pocas privilegiadas que pueden combinar ambas cosas”.

Su ingreso al mundo del relato fue algo inesperado. En marzo del 2020 se jugó el Sudamericano sub 20 femenino en las provincias de San Juan y San Luis. Por entonces, este campeonato no entraba en la agenda oficial de los medios, pero DirecTV tenía los derechos, y una colega suya le dijo que le había pasado su contacto a un productor. “Fue todo muy loco. Un día me suena el teléfono y era un productor de DeporTV. Me preguntó si era locutora y le dije que sí. Si me gustaba el fútbol femenino y también le dije que sí. Pero cuando dio por hecho que relataba fútbol le tuve que decir que no…”, recordó entre risas.

El productor le pidió entonces que le enviara un audio relatando algunas jugadas del partido que Argentina jugaría esa noche. “Puse el partido en la tele, y cuando iba a empezar a relatar, me quedé en blanco. Saque de arco… pase… pase. Todo lo que sabía de fútbol se me había borrado instantáneamente. Bueno, cuestión que terminó el partido y no pude grabar nada. Después miré el resumen y relaté sobre eso”, precisó, y unos minutos más tarde, llegó al final de la historia. “Me respondieron que tenía que corregir algunas cosas, pero que estaba para transmitir los próximos tres encuentros de Argentina. Así empecé, el primer relato fue serio y formal y después me fui soltando”. Vale destacar que Agustina se transformó de esa forma en la primera mujer en relatar partidos de fútbol femenino por televisión.

Y aunque en los últimos años, la presencia de mujeres en los medios se multiplicó, Agustina subrayó que en el ámbito del periodismo futbolero siguen prevaleciendo los hombres. “El ambiente es muy jodido, y aún somos muy pocas mujeres. No nos resulta fácil insertarnos en los medios. Sí es cierto que en la actualidad existe un mayor compañerismo entre pares que antes no se sentía, porque las mujeres competíamos por los pocos puestos laborales que había”, enfatizó.

– ¿En qué sentido decís que es muy jodido?

– En que el ambiente del fútbol sigue siendo muy machista. Aunque hoy por hoy ya haya muchas más mujeres en el entorno, esto sigue sucediendo. En el ambiente laboral, el acoso de alguna manera u otra está presente. Si bien esto es un hecho de casi todos los días, no se debería naturalizar en ningún ámbito. Es una lucha constante para las mujeres.

– ¿Y en el ambiente de los clubes pasa lo mismo con el fútbol femenino?

– Claro, allí también participan muchos hombres. Pero no se trata de una cuestión de género, sino de capacitación de género de ambas partes, tanto en el hombre como en la mujer. Rosana Vallejos, por ejemplo, hoy es entrenadora de Estudiantes de la Plata, pero anteriormente dirigía a Rosario Central y por su culpa trece futbolistas decidieron irse y algunas dejaron la actividad. Pero, además, es mucho más fácil elegir a un hombre para dirigir chicas, habiendo tantas técnicas que se reciben por año y podrían ejercer tranquilamente ese puesto.

El trabajo de Agustina puso de manifiesto varias de esas injusticias e irregularidades, y las plasmó desde su propio medio: FutFemGol.com.

– ¿Cómo surgió el proyecto de FutFemGol?

– Un día me llamó una amiga productora y me dije que Maca Sánchez iba a demandar a la UAI Urquiza y a la AFA por precarización laboral. Fue un antes y un después en el fútbol femenino, porque a raíz del caso de Maca muchas jugadoras salieron a reclamar lo mismo. Entonces teníamos la necesidad de difundir lo que estaba pasando, y empezaron a replicarse los casos. Lo que hicimos fue crear un medio para difundir cada situación. En paralelo se fue gestando el fútbol femenino profesional, que obligó a que los clubes afiliados a la AFA tengan al menos ocho jugadoras con un contrato profesional, que con el correr del tiempo se extendió a más de diez. Después nos fuimos encontrando con que la gente quería saber sobre resultados, estadísticas, y cosas que los medios grandes no informaban. Hoy estoy orgullosa del sitio, que se sostiene con el apoyo de los suscriptores, que todos los meses aportan su granito de arena.

Su labor periodística en el fútbol femenino la llevó a cubrir los dos últimos mundiales. En el primero, en Francia 2019, la aventura no resultó nada fácil. Argentina volvía a un Mundial luego de doce años. “Me costó mucho vender mi cobertura en los medios”, recordó, y contó que hacía poco se había quedado sin trabajo. “Golpeé las puertas de todos los canales y la respuesta que me daban era: si pasa algo te usamos”. Pero Agustina tenía un objetivo: tenía que estar como sea en aquel Mundial. “Vendí mi auto, renuncié a mi trabajo como productora en TyC, y viajé”, contó.

Y tras el extraordinario partido en el que la Selección Argentina le empató sobre la hora a Escocia, con un 3 a 3 inolvidable, el teléfono de Agustina no paró de sonar y así pudo recuperar algo del dinero invertido en aquel viaje. Pero eso no fue todo. A su regreso al país, la vida le cambió por completo: los caminos comenzaron a fluir y le llegaron varias propuestas de grandes medios televisivos.

Su segunda experiencia mundialista fue muy distinta. “Este año cubrí el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Viajé para la TV Pública, había un equipo de producción allá, también hice colaboraciones para ESPN, y con mi medio un poco más consolidado. Fui armada de una manera muy diferente, pero nunca me olvido de la piba que fue en 2019 y vendió el auto”, contó y aseguró que “de hecho vi a un montón de compañeras que fueron invirtiendo hasta el último de sus ahorros. Por eso hay que laburar por esas pibas, para que lleguen a tener los mismos recursos que hoy tengo yo”.

Sobre el final de la charla, Agustina mantuvo intacta su sonrisa para posar en cada una de las fotos con los alumnos en las que fue requerida. Una sonrisa que parece ser la consecuencia de los logros obtenidos en el mundo del periodismo futbolero que, lentamente, empieza a tener perfume de mujer.

Valentina Fernández, Camila Medina, Iara Benítez, Martín Fabricio Castro y Marcelo Robledo